Segmento Especial:
Carta de la Tierra
Internacional
Vol.4
N.° 2
2021
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
145
Mg. Damasia Ezcurra
Ministerio de Educación, Argentina
damaezcurra@gmail.com
Lic. Angélica Gómez Pizarro
Ministerio de Educación, Argentina
agomezpizarro@bue.edu.ar
La Carta de la Tierra: Un instrumento pedagógico potente para una educación
transformadora
RESUMEN: Este artículo presenta la experiencia de un taller vivencial utilizando
como marco teórico e inspirador la Carta de la Tierra. Dicha experiencia, se
realizó en el 2018 con el equipo de la Unidad de Proyectos Especiales de
Educación para la Sustentabilidad (UPE ES) del Ministerio de Educación de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. Los resultados del encuentro
evidenciaron que utilizar este documento como herramienta pedagógica de
manera inmersiva e innovadora fue a la vez disruptivo, integrador y
esperanzador. Los participantes encontraron valor en el aporte de este
documento para su trabajo como formadores de formadores y se vieron ‘re-
encantados’ con su quehacer cotidiano.
Palabras claves: Educación para la Sustentabilidad, Educación transformadora,
Carta de la Tierra.
Estamos en un momento crítico de la historia de la
Tierra, en el cual la humanidad debe elegir su futuro.
(...) Para seguir adelante, debemos reconocer que, en
medio de la magnífica diversidad de culturas y formas
de vida, somos una sola familia humana y una sola
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
146
comunidad terrestre con un destino común. Debemos
unirnos para crear una sociedad global sostenible
fundada en el respeto hacia la naturaleza, los
derechos humanos universales, la justicia económica y
una cultura de paz. En torno a este fin, es imperativo
que nosotros, los pueblos de la Tierra, declaremos
nuestra responsabilidad unos hacia otros, hacia la
gran comunidad de la vida y hacia las generaciones
futuras. (Preámbulo, Carta de la Tierra, 2000)
En la década del 90’ se inició un proceso histórico que tuvo como misión
construir una ‘nueva hoja de ruta’ para guiar la transición hacia el desarrollo
sostenible. Se lle a cabo un diálogo intercultural a nivel mundial de una
envergadura inédita, convirtiéndose en el proceso más inclusivo y participativo
que se haya efectuado jamás en torno a la creación de una Declaración
Internacional. Los principales impulsores, Maurice Strong (Secretario General de
la Cumbre de la Tierra 92’ en Río de Janeiro) y Mikhail Gorbachev, trabajando a
través de organizaciones que fundaron (Consejo de la Tierra y Green Cross
International respectivamente), lanzaron esta iniciativa que contó con el apoyo
del Gobierno holandés. El proceso de redacción se basó en cientos de
documentos internacionales y en un proceso de consulta abierto e inclusivo
1
.
El documento que emerge gracias a este esfuerzo compartido fue la Carta de
la Tierra y las líneas que compartimos en el epígrafe invitan a toda la familia
humana a transformar la consciencia en acción pertenecen a su preámbulo.
En este artículo se comparte la experiencia de un taller vivencial en el que se
1
La información compartida proviene del artículo escrito por Blaze, Peter y Vilela, Mirian (2005) “Building
Consensus on Shared Values” en “The Earth Charter in Action”.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
147
utilizó este documento como marco teórico e inspirador, con el objetivo de
sensibilizar a docentes y educadores acerca de la oportunidad de utilizarlo en
los procesos educativos que llevan adelante. Dicho encuentro, se realizó en el
2018 con el equipo
2
de la Unidad de Proyectos Especiales de Educación para
la Sustentabilidad (UPE ES)
3
del Ministerio de Educación de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires, Argentina.
LA CARTA DE LA TIERRA
La Carta de la Tierra es una declaración de principios éticos para la
construcción de una sociedad global justa, sostenible y pacífica en el siglo XXI.
Es un documento vivo producto de un proceso consultivo internacional que
duró alrededor de 10 años hasta su publicación en el año 2000. Su contenido
entrama valores compartidos entre diferentes culturas, religiones y áreas de
conocimiento. Actualmente, la organización que la difunde
4
impulsa un
movimiento global de individuos y organizaciones en 89 países de todo el
mundo promoviendo su visión de sostenibilidad.
Algunos leen esta Carta y se emocionan, otros se llenan de esperanza al ver la
potencialidad humana cuando se hermana por un bien mayor. Llega a la
2
Las autoras de este artículo eran integrantes de este equipo al momento de la realización del taller:
Damasia Ezcurra como Titular de la Unidad y Angélica Gómez Pizarro como Coordinadora General.
Ambas facilitaron el taller junto con otras integrantes: Johanna Cherry Castro (Coordinadora del área de
Huertas), Karina Giménez (área contenidos pedagógicos) y Natalia Verónica Gutiérrez (Coordinadora
Reconocimiento Escuelas Verdes).
3
En el 2020 la UPE ES se convirtió en la Gerencia Operativa de Educación para la Sustentabilidad
dependiente de la Subsecretaría de Tecnología Educativa y Sustentabilidad del Ministerio de Educación
del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
4
La Carta de la Tierra Internacional es una organización de la sociedad civil que impulsa el movimiento
global de la Carta de la Tierra al proporcionar información, una plataforma de intercambio y posibilidades
educativas para convertir la conciencia en acción.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
148
mente y al corazón interpelando a las personas a conectarse con su visión y
propósito de vida. Es un instrumento que bien empleado puede resultar muy
poderoso y transformador. Por esto, utilizarlo en procesos educativos resulta una
oportunidad:
“La Carta puede facilitar la exploración creativa de formas de desarrollo
que sean más ambiental y socialmente responsables. Para lograrlo, es
esencial promover una educación que ayude a la gente a comprender
los cambios fundamentales necesarios para materializar el desarrollo
sostenible.” (La Carta de la Tierra Internacional, 2009, p2)
Además, entre los objetivos de la Educación para el Desarrollo Sustentable está:
“inspirar y cultivar valores que nos guíen hacia un mundo más justo, pacífico y
sustentable, entonces la Carta de la Tierra puede ser una declaración explícita
y una visión de lo que eso significa.” (Cromwell, 2019, p.35) Por esto, es un
recurso tan valioso para utilizar en el espacio educativo.
La escuela puede y debe emprender un camino hacia la transformación de su
cultura escolar regida por una visión compartida y apoyada en los valores de
paz, cuidado, respeto por la vida y regeneración. Además de ser una caja de
resonancia de las problemáticas de la sociedad, tiene la oportunidad de
posicionarse como un faro esperanzador para su comunidad educativa
habitando los valores que intenta promover en el futuro. Al emprender este reto
tiene “un doble objetivo: preparar a sus alumnos para los desafíos venideros y
también empoderarlos para que sean protagonistas y participen activamente
en la construcción de este porvenir” (Ezcurra, 2019, p.126).
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
149
Utilizar la Carta para la construcción de esta visión, favorece experiencias
significativas de aprendizaje y, a su vez, contribuye con ese gran desafío de
construir una cultura institucional bajo una mirada crítica y transformadora. A
continuación, presentaremos varias de estas oportunidades.
A la hora de emprender un proyecto institucional o áulico que busque
promover el “desarrollo sostenible”, es muy importante como primer paso
establecer límites claros a la interpretación de este binomio. Dicho significante
despliega un gran abanico de significados, convirtiendo los rumbos de las
escuelas que se embarcan en estos proyectos muy disímiles entre sí. La forma
de interpretar este binomio puede tener implicancias en la práctica docente e
impregnar la cultura escolar. Lograr un acuerdo acerca de los valores y
principios básicos comunes parecen ser necesarios para esclarecer el camino.
En relación con esta disyuntiva, el proceso de elaboración de la Carta de la
Tierra para convertirla en una hoja de ruta fue ejemplar. Duró varios años de
diálogo y discusión involucrando a personas de todo el globo. El alto grado de
participación que conllevó su elaboración es precisamente la fuente de su
legitimidad. Por esto, puede ser utilizado por la escuela como una visión robusta
de “desarrollo sostenible”, y a partir de ésta contextualizarla a la realidad de la
institución.
En este mismo sentido, presenta un entramado coherente y consistente de
principios que pueden servir como destellos de cómo se puede hacer realidad
la sustentabilidad. La institución precisa una brújula para que la comunidad
educativa sepa en qué está embarcada. Acuerdos básicos comunes, que
orienten por qué trabajar, qué sostener y qué defender.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
150
En este documento se articula una mentalidad de interdependencia global y
responsabilidad compartida. Más allá de la pluralidad cultural de los diferentes
pueblos del mundo, propone a la humanidad como una sola familia y la
identifica también con el resto de la comunidad de vida terrestre. Ofrece la
posibilidad de despertar en los alumnos un sentir de ciudadanía global más allá
de las paredes del aula y las fronteras políticas:
“Somos ciudadanos de diferentes naciones y de un solo mundo al mismo
tiempo, en donde los ámbitos local y global, se encuentran
estrechamente vinculados. Todos compartimos una responsabilidad
hacia el bienestar presente y futuro de la familia humana y del mundo
viviente en su amplitud. El espíritu de solidaridad humana y de afinidad
con toda la vida se fortalece cuando vivimos con reverencia ante el
misterio del ser, con gratitud por el regalo de la vida y con humildad con
respecto al lugar que ocupa el ser humano en la naturaleza” (Preámbulo,
Carta de la Tierra, 2000).
Interpela al lector con la exigencia de una transformación sustancial individual,
necesaria para la transformación colectiva: Esto requiere un cambio de mente
y corazón (...) La elección es nuestra: formar una sociedad global para cuidar
la Tierra y cuidarnos unos a otros o arriesgarnos a la destrucción de nosotros
mismos y de la diversidad de la vida. Se necesitan cambios fundamentales en
nuestros valores, instituciones y formas de vida.” (El camino hacia adelante,
Carta de la Tierra, 2000, p. 5) Invita a vivir en coherencia entre lo que decimos,
y seguramente queremos, “un mundo más justo, equitativo, sustentable y en
paz” y lo que efectivamente hacemos en cada uno de nuestros actos. Una
coherencia que invita también a una comunión del saber, del hacer y del ser.
Es decir: pienso lo que hago y siento; siento lo que pienso y hago; hago lo que
pienso y siento.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
151
Brinda una visión problematizadora y también de esperanza, pero
principalmente, es un llamado a la acción en el que estamos todos incluidos:
“Que el nuestro sea un tiempo que se recuerde por el despertar de una nueva
reverencia por la vida, la firme resolución de alcanzar la sostenibilidad, el
aceleramiento en la lucha por la justicia y la paz y por la alegre celebración de
la vida.” (El camino hacia adelante, Carta de la Tierra, 2000, p.5) Desde la
escuela son muchas las acciones concretas que se pueden llevar adelante
relacionadas con la gestión ambiental, la ciudadanía participativa y hasta
proyectos de aprendizaje en servicio. Todo este repertorio es tierra fértil para el
aprendizaje significativo.
Por todas estas razones, es que, desde la Unidad de Proyectos Especiales de
Educación para la Sustentabilidad del Ministerio de Educación de la Ciudad de
Buenos Aires, se decidió utilizar la Carta de la Tierra como instrumento central
para realizar una experiencia inmersiva con todo el equipo de trabajo.
CONTEXTO DE LA EXPERIENCIA
En el mes de diciembre del 2018, se realizó un taller vivencial con el equipo de
la UPE ES del Ministerio de Educación e Innovación de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires. Dicha unidad está compuesta por tres programas: Escuelas
Verdes, Ministerio Sustentable y Ciudadanía Global.
5
El equipo está conformado por profesionales de diferentes disciplinas entre las
cuales se destacan: Ciencias Ambientales, Ciencias de la Educación, Ciencias
5
Escuelas Verdes: https://www.buenosaires.gob.ar/educacion/escuelas-verdes
Ministerio Sustentable: https://www.buenosaires.gob.ar/educacion/ministerio-sustentable
Ciudadanía Global: http://www.ciudadaniaglobal.bue.edu.ar/
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
152
de la Comunicación, Ingeniería, Ciencias Políticas y Diseño, entre otras. A su
vez, cuenta con docentes de carrera que están en comisión de servicio y
realizan tareas de capacitación a pares y acompañamiento pedagógico en
las escuelas. En relación con el rango etario, el 80% del equipo se encuentra
entre los 25 - 35 años, y el 20% supera esa edad. La mayoría son mujeres, lo 9
de los 43 integrantes del equipo son hombres. El trabajo del equipo se
especializa en la capacitación y realización de proyectos ambientales con los
docentes de las escuelas de la ciudad referidos a las distintas dimensiones de la
sustentabilidad. En general, todos ellos están muy comprometidos y
sensibilizados con la causa ambiental.
Se realizó en la Huerta Modelo del Programa Escuelas Verdes (perteneciente a
la UPE ES) que está ubicada en el Jardín Maternal 8 DE 9. Este espacio
propone un aula abierta de aprendizaje para diversos actores. Se realizan
visitas educativas, prácticas de escuelas técnicas con orientación en jardinería
y colaboraciones con alumnos universitarios, entre otras actividades. Es un lugar
significativo que se fue construyendo de manera escalonada a lo largo de los
años y con la participación de toda la comunidad educativa. Además,
funciona como un aula verde donde se realizan prácticas de agroecología y
restauración de flora nativa.
DESARROLLO DEL TALLER VIVENCIAL
El Taller se realizó una vez finalizado el ciclo lectivo, en el mes de diciembre. Así,
los equipos de trabajo estaban más aliviados en cuanto a su carga laboral,
dado que las escuelas ya estaban en su receso de verano.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
153
Durante una jornada de un día, se convocó a sus integrantes con un doble
objetivo. Por un lado, sensibilizar acerca de las oportunidades que ofrece la
Carta de la Tierra como instrumento para sus prácticas diarias como
educadores para la sustentabilidad. Por otro lado, interpelar a los participantes
acerca del sentido de su tarea, utilizando la Carta de la Tierra como un marco
discursivo que les resuene genuino y con el cual puedan identificarse. En esta
interpelación, también, se intencionó que los participantes pudieran “...`renovar
los votos con aquella motivación primigenia que los condujo a la elección de
vida que implica ser educador (Sabbatini, 2019, p. 136).
Se optó por realizar un taller vivencial que incluya estrategias de enseñanza
innovadoras que inviten a los participantes a involucrarse íntimamente con su
aprendizaje. La Educación para la Sustentabilidad promueve procesos
transformadores que toquen la mente, los corazones y las manos de los
alumnos alterando “...nuestros niveles más profundos de conocimiento y
significado y, al hacerlo, influyan en nuestros niveles más inmediatos y
concretos de conocimiento, percepción y acción” (Sterling, 2010, p. 22). Con
este enfoque en mente, se diseñó un taller que tuviera algunos momentos
teóricos de presentación de contenidos, pero se priorizaron actividades que
incluyan la participación, el movimiento, la colaboración, lo lúdico, y la
reflexión individual. También, se buscó utilizar la huerta como lugar, ya que
representa un espacio muy significativo. Entre las actividades que se llevaron a
cabo se incluyeron: narración de cuentos, plantación de árboles, proyección
de videos, utilización de historietas, puestas en común y debates participativos,
juegos de colaboración y momentos de reflexión personal.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
154
El taller integró estos espacios en 4 módulos, dos por la mañana y dos por la
tarde. Tuvo una duración de 9 horas. A continuación, se detalla el contenido
de cada módulo:
Módulo 1 - La Carta de la Tierra y su proyección en la educación. Este
primer módulo tuvo como objetivo dar a conocer La Carta de la Tierra y
vincular sus principios y valores a la luz de las acciones y prácticas
cotidianas de los integrantes de la UPE ES para poder potenciarlos de
manera consciente. Para esto, se abordaron los siguientes temas: La Carta
de la Tierra; las distintas fases en su proceso de construcción; su legitimidad
como marco ético rector; y sus componentes y contenido. Se presentó a La
Carta de la Tierra como un instrumento de sensibilización educativa
proveedora de herramientas para movilizar la conciencia y desencadenar
acciones responsables; cultivar el desarrollo personal a través de una ética
del cuidado, y como apoyo curricular a pedagogías emergentes e
innovadoras. Las actividades vivenciales tuvieron lugar en la Huerta donde
se introdujeron los principios de La Carta de la Tierra, y cada participante
pudo elegir el que más lo interpelaba. Luego, se realizó una plantación de
un árbol nativo, y con sus raíces se enterraron unos pequeños papeles
donde los participantes escribieron los compromisos que les gustaría asumir
en relación con estos.
Módulo 2 - La Carta de la Tierra y nuestro trabajo cotidiano. Para esta
etapa del taller se presentaron los conceptos de “Aprendizaje basado en
proyectos” y el de “Comunidades de Aprendizaje” como dos estrategias
para propiciar instancias de Educación para la Sustentabilidad. Se propuso
una actividad colaborativa que promoviera el conocimiento y la
cooperación entre participantes que no suelen trabajar juntos. Cada área
de la UPE ES expuso problemáticas que se presentaban en su quehacer
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
155
cotidiano que les resultaban de difícil solución. Integrantes de otras áreas
debieron pensar en maneras originales de poder resolverlas y ofrecerlas a
sus colegas.
Módulo 3 - Pensamiento Sistémico y Desarrollo Regenerativo. En esta
instancia del taller, se abordó la necesidad de cambiar nuestros modelos
mentales a través de los cuales comprendemos la realidad. Se hizo foco en
la visión sistémica-compleja como una percepción del mundo orgánica,
integral y unitaria (en contraposición a un pensamiento racional,
fragmentado y reduccionista) que nos ofrece una perspectiva panorámica
para comprender la interdependencia de los sistemas de vida planetaria.
Se habló sobre los procesos de aprendizaje en el marco de esta visión y en
cómo facilitarlos desde nuestras prácticas educativas. A su vez, se presentó
el concepto de Desarrollo Sostenible desde una perspectiva compleja y
crítica abordando su polisemia y sus tensiones inherentes. Con este marco
se presentó la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Finalmente, se diferenció entre las concepciones de Desarrollo Sustentable
Débil y Desarrollo Sustentable Fuerte para culminar la presentación con el
enfoque de Desarrollo Regenerativo. Para este dulo se utilizaron
estrategias de narración de cuentos, proyección de videos, historietas,
puestas en común y debates participativos.
Módulo 4 - Educación Transformadora anclada en La Carta de la Tierra.
Durante el este módulo, se realizó una presentación de la educación
transformadora haciendo hincapié en la importancia de indagar acerca
de nuestras cosmovisiones. Para esto, se realizó un pequeño recorrido
teórico para graficar a qué nos referimos cuando hablamos de cosmovisión
y cómo ésta influencia nuestra manera de actuar individual y colectiva.
Luego, se abrió una discusión para indagar acerca de la cosmovisión que
prevalece en la Carta de la Tierra y una indagación acerca de la
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
156
cosmovisión en la que cada uno habita. A partir de esta discusión, se
propuso una reflexión desde nuestro rol como educadores, invitando a
pensar en cómo proponer una educación que pueda reacomodar
nuestras cosmovisiones, para lograr una relación sostenible y regenerativa
con toda la comunidad de vida y la tierra. En este módulo se proyectaron
videos y se leyó un extracto de libro.
APRECIACIONES GENERALES DE LOS RESULTADOS
La ejecución de este taller tuvo diversos resultados, entre ellos varios fueron
intencionados y otros emergentes no esperados. Para su evaluación, los
facilitadores fueron tomando notas durante la jornada registrando aportes,
opiniones y participaciones. A su vez, hacia el cierre se realizó una puesta en
común a modo de recapitulación y retroalimentación. Y, de manera posterior
al taller, se envió un formulario online para que los participantes expresen sus
apreciaciones y opiniones.
En relación con las observaciones registradas, durante el desarrollo de la
experiencia se evidenció una participación y constante por parte de cada uno
de los participantes. Además, hubo lugar para el debate desde una
perspectiva en la que se rescataron saberes previos y se construyeron otros en
conjunto, vinculados con cada uno de los principios de la Carta de la Tierra.
El primer módulo, se realizó en gran parte en el espacio exterior de la huerta.
Esta fue una instancia en la que los integrantes profundizaron su sentido de
pertenencia con el lugar y pudieron expresar cómo los interpelaba La Carta de
la Tierra. Colocar los compromisos de cada uno en las raíces de los árboles
plantados resultó en una experiencia movilizante. Algunas frases mencionadas
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
157
por los participantes fueron: “Es necesario permitirse la pregunta profunda a
nivel escolar”; “No tenemos una enfermedad incurable”; “Escuchar más voces
para tomar decisiones más justas”; “Cuidar y respetar lo que la tierra nos da”;
“Trabajar por la Soberanía Alimentaria para cuidar y respetar” y “Educar en
equidad de género.”
Como en el segundo módulo, se trabajaron en mayor profundidad los principios
y sus vinculaciones con cada una de las áreas, los participantes se vieron
reflejados en La Carta de la Tierra y comprobaron que compartían sus
fundamentos éticos. Los interpeló a un nivel emocional logrando conmoverlos y
emocionarlos. La actividad colaborativa inter-área fue muy productiva
ofreciendo nuevos puntos de vista e innovadoras soluciones a problemas viejos.
También, fortaleció los lazos entre los colegas de trabajo.
En el tercer módulo las discusiones se fueron complejizando y dieron cuenta de
un equipo altamente interdisciplinario y profesional. Un resultado emergente de
este espacio fue que funcionó como una verdadera comunidad de
aprendizaje y se fueron hilvanando y construyendo conocimientos con las
opiniones, experiencias y discusiones. Se potencla construcción colectiva de
conocimientos, identificaron desafíos comunes y se sintieron llamados a la
acción. Comenzaron a intercambiar propuestas, dando lugar a discusiones
ricas en puntos de vista divergentes y convergentes. Por momentos, los roles de
los facilitadores y los participantes se desdibujaron y surgiendo conclusiones y
apreciaciones superadoras a las presentadas.
El cuarto módulo resultó el más reflexivo. Se brindó un momento para la
indagación acerca de la cosmovisión personal de cada uno y hubo un
ejercicio metacognitivo de autoevaluación. Fue un espacio más íntimo y de
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
158
introspección. Resultó muy valorado para poder aterrizar lo experimentado en
la vida de cada uno.
Al finalizar el cuarto dulo, se realizó una actividad final con la intención de
recabar las apreciaciones generales del taller. Cada uno de los participantes
se tomó 5 minutos para escribir en un post-it dos/tres palabras que resuman su
aprendizaje. Posteriormente, lo debían pegar en una pizarra. Luego, se realizó
una lectura en conjunto, y estos fueron algunos de los conceptos clave que se
repitieron: pensamiento sistémico; trabajo en equipo; cambio de perspectiva;
diálogo; plantar futuro, entre otros.
Una vez finalizada esta actividad, un resultado emergente fue el
agradecimiento que expresó el equipo. Los participantes relataron mo se
vieron interpelados por varios de los conceptos trabajados y preguntaron cómo
tener acceso a la bibliografía referenciada. Por otro lado, mencionaron el
interés de incluir los conocimientos aprendidos en las planificaciones de sus
propias clases. También, sugirieron de manera unánime realizar más jornadas
de capacitación de este tipo durante el año. Entre las razones que esbozaron,
priorizaron la posibilidad de contar con un espacio reflexivo que posibilite su
desarrollo profesional continuo, el fortalecimiento de las relaciones
interpersonales entre el equipo y la construcción colectiva de una visión común
que los inspire.
A los días de finalizar la jornada, se envió un formulario online a todos los
participantes con tres preguntas abiertas:
1. ¿Qué aprendí del taller? Puede describirlo a partir de una palabra o frase.
2. A partir de una palabra o frase, describa, ¿qué me gustaría transmitir a otros
de lo aprendido?
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
159
3. ¿Qué inquietudes, observaciones o sugerencias le gustaría aportar?
En relación con la primera pregunta, los participantes compartieron muchos de
los conceptos que intencionalmente quisimos transmitir como: pensamiento
sistémico; comunidad de vida; interdependencia y complejidad. Por otro lado,
surgieron otros aprendizajes de índole más personal, que hablan de procesos
de transformación individual. A continuación, se comparte uno de estos
testimonios: “Aprendí que debo aprender a no enojarme con quienes no han
comenzado a transitar la transformación que me lleva a pensar de la manera
en que lo hago ahora, tengo que comprender que yo estuve también en el
lugar de ellos y necesitan el empujón iniciador para ser personas más globales,
y esa activación no es igual para todas las personas.”
En relación con lo que les gustaría compartir de lo aprendido, los participantes
mencionaron valores como: trabajo colaborativo interdisciplinario; comunidad
de valores; respeto por todas las formas de vida y el trabajo en equipo. Por otro
lado, también expresaron cuestiones que tenían que ver con el quehacer
cotidiano como: “incentivar la utilización de La Carta de la Tierra como un
recurso didáctico”; “incluir principios transversales a todo lo que trabajamos”;
“repensar nuestras prácticas”; “valorar los espacios de encuentro e
intercambio” y “transmitir calma y reflexión”.
En relación con las observaciones generales y sugerencias, se valoró
especialmente la posibilidad del encuentro y el intercambio inter-área entre
todos los participantes. Esto posibilitó que se conozcan más, saber cómo
resuelven sus inconvenientes, y pensar juntos cómo usarían la Carta de la Tierra.
Tuvieron la oportunidad de generar consensos y compartir un espacio donde
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
160
prevaleció la empatía y la participación. Se valoró especialmente el aporte de
las distintas miradas desde las especialidades de los participantes.
En suma, una vez realizada esta experiencia se evidenció que utilizar la Carta
de la Tierra como herramienta pedagógica en el taller vivencial fue a la vez
disruptivo, integrador y esperanzador. En vistas de los objetivos que se
propusieron para este taller, se puede afirmar que éstos se pudieron lograr
satisfactoriamente. La Carta de la Tierra como recurso pedagógico para la
práctica cotidiana de los educadores participantes les resultó muy valioso. Y los
participantes expresaron el entusiasmo que les producía verse interpelados en
su función como educadores, encendiendo el interés y encanto por su trabajo.
A su vez, vale destacar que a raíz de la realización de este encuentro se
comenzó a incorporar la Carta de la Tierra, sus principios y valores de manera
sistemática en la capacitación, y en los materiales propuestos como recursos
por la UPE ES. A lo largo de los 4 años posteriores a la experiencia descrita, se ha
utilizado en diversas instancias de formación a más de 17.950 docentes de
todos los niveles (inicial, primaria, secundaria, y terciario). Por último, algunos de
los participantes de este taller formaron parte de los equipos técnicos de
construcción de la Ley Nacional de Educación Ambiental Integral (Ley
27.621/21) que fue promulgada en Argentina en junio del 2021. Los aportes
brindados en esta redacción estuvieron en línea con los valores y principios de
la Carta de la Tierra.
El taller vivencial con formadores de formadores y elaboradores de políticas
públicas educativas permitió escalar el alcance e implementar instancias de
acción que dieron lugar a transformaciones tanto grupales como personales.
Asimismo, permitió abordar la Carta de la Tierra desde el aula, lugar
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
161
privilegiado, donde estudiantes son multiplicadores y agentes protagonistas del
cambio.
REFLEXIONES FINALES
Si entendemos que educar para la sustentabilidad no es solo transmitir ciertos
saberes cognitivos, sino que tiene que ver con formar a personas en valores y
principios para la construcción de sociedades más justas, diversas y sostenibles,
sabemos que la enseñanza fragmentada, enciclopédica y vertical tiene que
ser revisada. ¿Cómo formar para un futuro que todavía no está con nosotros y
que implica imaginarnos nuevas maneras de hacer las cosas? ¿Cómo
educamos en algo que implica un proceso de transformación personal y
colectivo? ¿Cómo educar para un futuro aspiracional, que aún no está, que
todavía no somos y no sabemos cómo será?
No es casual que a los 4 pilares principales de la educación que plantea Delors
(1996) en el documento “La educación encierra un tesoro”, aprender a
conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos, y aprender a ser; la UNESCO
haya agregado uno nuevo: aprender a transformar - a transformarnos y a
transformar la realidad. De eso se trata este campo. Tiene que ver con formar
en el autoconocimiento y la empatía para poder convertirnos en el tipo de
persona que queremos ser y facilitar el proceso para que otros, también lo
puedan hacer. La transformación cultural, es lenta, lleva tiempo y nos envuelve
e involucra. Depende no solamente del cambio de hábitos, sino de tener la
valentía y humildad de examinarse e iniciar un proceso de cambio. Por esto, la
Educación para la Sustentabilidad invita a ser transformadora.
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
162
Como educadores somos forjadores de futuro y por esto tenemos una gran
responsabilidad. Nuestras acciones cuentan y tienen impacto en la vida de
nuestros alumnos. Por esto, es muy importante que nos preguntemos: ¿qué
queremos transmitir, cultivar, encender?, ¿Cuál es el legado que queremos
construir? Quizás una visión compartida lo suficientemente amplia como para
unir a la humanidad. Una mentalidad de interdependencia global y
responsabilidad compartida. Un enfoque problematizador y también de
esperanza que llame a la acción. La conciencia de que una transformación
sustancial individual es necesaria para la transformación colectiva. Una visión
que logre cultivar valores que nos guíen hacia un mundo más justo, pacífico y
sustentable. Si es todo esto lo que nos moviliza y empuja a persistir en esta labor,
la Carta de la Tierra es un documento muy potente que nos puede servir como
recurso, inspiración y hoja de ruta.
Para cerrar, compartimos las palabras de Wangari Maathai, activista ambiental
que logró convertirse en la primera mujer africana Premio Nobel de la Paz
(2004) “Hay palabras tremendamente provocadoras que invitan a la reflexión
en este documento. Lo que debemos hacer, en lugar de simplemente leer, es
reflexionar sobre lo que significan para que podamos pasar a la acción. (...) Me
encanta hacer esto porque puedo hablar, puedo reflexionar y al final puedo ir
a casa, cavar un hoyo y plantar un árbol. (...) Los animo a hacer lo mismo:
encontrar la palabra en la Carta de la Tierra que les hable y reflexionar sobre
ella para darle significado. ¡Entonces permítete abandonar la apatía y pasar a
la acción!” (Maathai, 2005, p. 13)
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
163
REFERENCIAS
Blaze, Peter y Vilela, Mirian (2005). Building Consensus on Shared Values en Blaze
P., Vilela M., y Roernik A. The Earth Charter in Action - Toward a Sustainable
world. KIT Publishers BV, Amsterdam, 2005
Carta de la Tierra (2000). Disponible en: https://cartadelatierra.org/lea-la-carta-
de-la-tierra/ (consultado en septiembre 2021).
Crowell, Sam (2019). Enseñanza emergente y educación para el desarrollo
sostenible, en Sabbatini y Ezcurra, Educar para la Sustentabilidad: reflexiones y
experiencias transformadoras. Aique, Buenos Aires.
Delors, J. y otros (1996). La educación encierra un tesoro, Informe a la UNESCO
de la Comisión Internacional sobre la Educación para el siglo XXI. Ediciones
UNESCO, Paris. Disponible en línea:
https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000109590_spa
Ezcurra, Damasia (2019). Escuelas para la Sustentabilidad: Tendiendo puentes
para la transformación de la cultura escolar en Sabbatini y Ezcurra, Educar para
la Sustentabilidad: reflexiones y experiencias transformadoras. Aique, Buenos
Aires.
La Carta de la Tierra Internacional (2009). Guía para utilizar La Carta de la Tierra
en la educación. Disponible en línea: https://cartadelatierra.org/library/guia-
para-usar-la-carta-de-la-tierra-en-la-educacion/ (consultado en septiembre
2021)
Revista Académica Divulgativa Arjé
ISSN: 2215-5538 Julio a Diciembre, 2021 Volumen 4, Número 2
Segmento Especial: Carta de la Tierra Internacional
164
Maathai, Wangari (2005). Abandon Apathy and Be moved to Action en The
Earth Charter in Action, KIT Publishers BV, Amsterdam, The Netherlands.
Sabbatini, Carla (2019). La Educación para la Sustentabilidad como
oportunidad para la mejora educativa en Sabbatini y Ezcurra, Educar para la
Sustentabilidad: reflexiones y experiencias transformadoras. Aique, Buenos Aires.
Sterling, Stephen (2010). Transformative Learning and Sustainability: sketching
the conceptual ground en Learning and Teaching in Higher Education. Issue 5,
2010-11