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Yulök Revista de Innovación Académica, ISSN 2215-5147, Vol. 6, N.º 1
Enero-Junio 2022, pp. 67-70
Araya, M. Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica.
Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica
Manuel Araya Incera
Academia Morista Costarricense. San José, Costa Rica
manuel.araya@ucr.ac.cr
https://orcid.org/0000-0001-8868-4811
Resumen
El ensayo aborda la pintura histórica como uno de los géneros preeminentes del arte pictórico. Como recurso visual, la pintura
histórica cuenta una historia y constituye un medio alternativo al discurso escrito o hablado propio del historiador. En Costa
Rica el género de la pintura histórica ha sido muy escasamente desarrollado. A finales del siglo XIX figuran en este género
Lorenzo Fortino, Toribio Jerez y Enrique Echandi; el italiano Aleardo Villa pintó en su país, la alegoría sobre la producción
del café y del banano que adorna el Teatro Nacional desde su inauguración en 1897. En el siglo XX figuran temas históricos
en obras de Lilly Artavia y de Carlos Aguilar Durán. Destaca en nuestros días la obra de Manuel Carranza Vargas quien dio
al género de la pintura histórica un impulso novedoso en la plástica costarricense, al aportar en sus obras al óleo, imágenes
estéticas de exquisita belleza y calidad técnica depurada.
Palabras clave: Pintura histórica en Costa Rica, Manuel Carranza Vargas, Guerra contra los libusteros, Campaña
Nacional 1856-1857.
Abstract
The essay discusses historical painting as one of the preeminent genres of pictorial art. As a visual resource, historical pain-
ting tells a story and constitutes an alternative to the historian’s written or spoken discourse. In Costa Rica, the genre of his-
torical painting has been very scarcely developed. At the end of the 19th century, Lorenzo Fortino, Toribio Jerez and Enrique
Echandi appeared in this genre; the Italian Aleardo Villa painted in his country, the allegory on the production of coffee and
bananas that adorns the National Theater since its inauguration in 1897. In the 20th century, historical themes appear in works
by Lilly Artavia and Carlos Aguilar Durán. The work of Manuel Carranza Vargas stands out in our days. He gave the genre of
historical painting a novel impulse in Costa Rican plastic arts, by contributing in his oil works, aesthetic images of exquisite
beauty and refined technical quality.
Keywords: Historical painting in Costa Rica, Manuel Carranza Vargas, War against libusters, National Campaign
1856-1857.
Manuel Carranza Vargas and historical painting in Costa Rica
Referencia/ reference:
Araya, M. (2022). Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica. Yulök Revista de Innovación Académica, Vol.6 (1).
https://doi. 10.47633/yulk.v6i1.446
Recibido: 4 de diciembre del 2021 Aceptado: 25 de enero del 2022
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Araya, M. Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica.
Introducción
La pintura sobre temas históricos, o pintura histórica, fue
un género preeminente en el arte pictórico. Hasta media-
dos del siglo XIX fue el “gran género” que primaba so-
bre otros en la pintura, tales como el retrato y el paisaje.
Bien se tratara de motivos que expresaran acontecimien-
tos cuya memoria se buscaba preservar y exaltar, o bien,
temas emanados de la literatura, de la mitología o de la
religión. Además de la calidad técnica, en este género pic-
tórico se valoraba lo elevado del mensaje moral o intelec-
tual que debía transmitir la escena que se representaba.
Al pintor se le exigía dominio técnico en varios géneros
(el retrato, el paisaje, entre otros), y debía tener un bagaje
cultural con conocimientos en historia, en literatura, en
historia sagrada.
La pintura histórica empezó a perder presencia ante el
impulso arrollador de nuevos estilos pictóricos y nuevas
temáticas surgidas en los siglos XIX y XX. Como era
el género favorito de la academia, contra ella lucharon
los movimientos vanguardistas de la pintura contemporá-
nea. El realismo pictórico adoptó temas que incorporaban
personajes y escenas de la vida cotidiana, gente común
y corriente. Al igual que harían los impresionistas, los
temas históricos centrados en personajes de la nobleza,
militares connotados o acontecimientos vinculados con la
Iglesia o con la religión, fueron rechazados. No obstante,
aún dentro de las corrientes vanguardistas del siglo XX
se produjeron obras extraordinarias de pintura histórica.
Una de ellas, el Guernica de Pablo Picasso (1937), el cual
surge como testimonio de denuncia ante el bombardeo
del poblado civil homónimo en la guerra que se estaba
desarrollando en España. Otras lo fueron las pinturas de
los muralistas mexicanos José Clemente Orozco, David
Alfaro Siqueiros y Diego Rivera, quienes expresan la di-
námica de conmoción social y política que vivió la socie-
dad mexicana durante las primeras décadas del siglo XX,
y que pintan en un formato monumental, sobre grandes
paredes, con lo que dan a sus obras un alcance para un
público masivo.
La pintura histórica posee, en su contenido, un carácter
narrativo; la escena que se representa cuenta una historia.
Como recurso visual, constituye un medio alternativo al
discurso escrito o hablado propio del historiador. El dis-
curso histórico ha sido abordado y validado en el ámbito
académico cuando se presenta en forma escrita, limitán-
dose el valor que tienen otros medios, tal cual el de la
imagen en una pintura, para la construcción discursiva de
un proceso histórico. El historiador estudia una realidad
del pasado y la reconstruye y explica mediante la palabra
escrita en un discurso cuyo contenido dependerá de sus
habilidades intelectuales, talento y dominio del método.
Un pintor de temas históricos puede, adicionalmente a su
labor de artista plástico, asumir el oficio del historiador,
investigar, informarse y expresar sobre el lienzo su inter-
pretación de un acontecimiento histórico.
La pintura histórica en Costa Rica
En Costa Rica el género de la pintura histórica ha sido
muy escasamente desarrollado. El recuento de pintores
inicia con el italiano residente en el país en los años se-
senta del siglo XIX, Lorenzo Fortino, quien pintó algunas
obras sobre las acciones bélicas que llevaron a la captu-
ra del expresidente Juan Rafael Mora Porras, del Gene-
ral José María Cañas y del grupo de sus seguidores en
Puntarenas en setiembre de 1860 (Carranza Vargas, s.f.)
Los cuadros pintados al óleo incluyen “Combate de La
Angostura del 28 de setiembre de 1860”, “El paso del río
Barranca por las tropas del Gobierno” y “Campamento de
las tropas del Gobierno”.
El nicaragüense Toribio Jerez realizó en el año 1888 va-
rias obras al óleo por encargo del obispo de Costa Rica
Monseñor Bernardo Augusto Thiel; la temática de los
cuadros se refiere a lugares en los cuales se llevaron a
cabo acciones bélicas que marcaron el triunfo de las fuer-
zas armadas de Costa Rica sobre los invasores filibus-
teros. Los títulos de estas obras son: “Batalla de Santa
Rosa, 20 de marzo de 1856”, “Punta Castilla, 30 de di-
ciembre de 1856” y “El Fuerte de San Carlos, 31 de di-
ciembre de 1856”.
El italiano, Aleardo Villa pintó en su taller en Milán, por
encargo del Gobierno de Costa Rica y para decorar el
Teatro Nacional que estaba en la fase final de su cons-
trucción, la “Alegoría del café y del banano” (1897); obra
icónica que se mantiene en este Teatro hasta el presente
(Fischel, p. 279).
Durante la mayor parte del Siglo XX, el género de la pin-
tura histórica quedó representado casi exclusivamente
por el lienzo al óleo de Enrique Echandi “La quema del
Mesón por Juan Santamaría”; obra que fue expuesta por
primera vez en el año 1897, esta suscitó intensas críticas
en el incipiente mundo cultural de la época, debido a la
representación que el pintor hizo del héroe nacional Juan
Santamaría (Molina, 1992, p. 195; Molina, 2010, p. 56).
En contraste con la imagen de un héroe triunfante que se
promovía en aquellos momentos en que las autoridades
civiles habían rescatado del olvido la memoria de la ac-
ción heroica de Juan Santamaría, Echandi lo presentaba
en su cuadro con el cuerpo acribillado por las balas, las
piernas doblegadas y a punto de caer al suelo; un indivi-
duo además de pelo ensortijado y piel oscura que iden-
tificaba las características físicas de un mulato, lo cual
chocaba con los fuertes prejuicios racistas de la sociedad
en aquellos años.
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Araya, M. Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica.
En los años treinta del siglo XX la artista plástica costa-
rricense Lilly Artavia Bolandi, entonces funcionaria del
Museo Nacional, realizó para esta institución copia de las
pinturas de Toribio Jerez, y ejecutó otras obras de su crea-
tividad, sobre temas de la guerra contra los filibusteros
(Museo de las mujeres).
En el año 1954 el artista italiano radicado en Costa Rica,
Lucio Ranucci, pintó un mural de gran dimensión al que
tituló “La Segunda República”, el cual se exhibió durante
muchos años en la sala del aeropuerto Juan Santamaría.
El mural fue removido tras la remodelación del aero-
puerto y guardado en algún recinto hasta que volvió a
exhibirse a partir del 2018 en el vestíbulo del Centro de
Convenciones de Costa Rica.
En el presente, el artista alajuelense Carlos Aguilar Durán
ha producido una amplia obra plástica sobre escenas de la
guerra contra los filibusteros, en una variedad de técnicas
que incluyen acuarelas, óleos, murales, esculturas, entre
otras. Sus acuarelas ilustran libros y otros materiales di-
dácticos.
El escultor Fernando Calvo ha producido obras de gran
formato en óleo y xilografías, sobre la figura de Juan Ra-
fael Mora Porras y la guerra contra los filibusteros.
La obra de Manuel Carranza Vargas
Destaca en nuestros días la obra de Manuel Carranza
Vargas quien dio al género de la pintura histórica un im-
pulso novedoso en la plástica costarricense, al aportar en
sus obras al óleo, sobre lienzos de gran tamaño, calidad
estética de exquisita belleza y calidad técnica depurada;
además de proporcionar la escena de un acontecimien-
to histórico que reconstruye y plasma en la tela después
de una paciente investigación en fuentes bibliográficas,
documentales y consulta a especialistas por parte de este
pintor-historiador.
En sus cuadros Carranza muestra una paleta de colores
vivaces, intensos, que dan abundante luminosidad a las
escenas. Con una notable habilidad en la técnica del retra-
to, sus personajes expresan con nitidez rasgos de persona-
lidad y de las emociones que están viviendo en la escena
en la cual han sido captados por el pintor. Acucioso
investigador de fuentes históricas para la identificación
de los rasgos fisonómicos de los personajes, según son
descritos en relatos sobre su carácter, o en fotografías
cuando están disponibles, da a su pintura un estilo de ape-
go a la realidad; aquella realidad que se vive en la escena
pintada. Se suma a ese componente de realismo, una cui-
dadosa atención a los detalles: objetos, adornos, vestidos,
modo de vida, etc. Elementos cuya presencia en el cuadro
tienen justificación porque el pintor-historiador encontró
las fuentes documentales que respaldan su inclusión.
La producción pictórica de Manuel Carranza se dedicó,
antes de su incorporación en la pintura histórica, al re-
trato, a escenas paisajistas, a cuadros costumbristas de la
vida cotidiana, entre otros. La incursión en este género
pictórico fue reciente y corto; sus primeras obras datan
del año 2010 y fue a partir del 2015 en que produjo de
manera más intensa. Lamentablemente, la vida no le al-
canzó para desarrollar más su obra. No obstante, el le-
gado que nos dejó es de una riqueza extraordinaria. La
intensidad de su producción, sumada a la creatividad en
la identificación de temas y escenas, constituyen un apor-
te de enorme valor para el género de la pintura histórica
en Costa Rica.
Don Manuel Carranza Vargas merece ser recordado como
una página innovadora de nuestra historia… siempre se
preocupó porque sus acciones en pro del país tuvieran
consecuencias favorables en la educación de la niñez y
la juventud, y la pintura no fue excepción; esperaba que
sus pinturas históricas complementaran las enseñanzas
de la Historia en los colegiales y ese género pictórico en
estudiantes de arte. Este género tal como él lo practicaba
favorece esa finalidad, pues era un paciente investigador
de previo a plasmar en tela un evento. Se informaba con
fuentes bibliográficas y documentales, consultaba con es-
pecialistas cada uno de los detalles que ilustraba en sus
pinturas: rasgos fisonómicos de los personajes, objetos
como adornos, los vestidos, los modos de vida, acciones:
no incluía lo que sus fuentes no documentaran. (Conse-
jo de Dirección de la Academica Morista Costarricens2,
2021, p.8)
Yülok Revista de Innovación Académica, presentó el
Vol.5 Nº2 en diciembre del 2021, cuya portada se ilustró
con la pintura de don Manuel Carranza Vargas que él titu-
ló “El taller de imprenta”,
La escena representa una breve pausa en el que los
operarios muestran pruebas del material producido al
propietario de la Imprenta y a algunos ilustres visi-
tantes. Los personajes representados son: Miguel Ca-
rranza Fernández, quien fue el importador de la pri-
mera imprenta a nuestro país en el año 1830 y abrió
su negocio con el nombre de Imprenta La Paz; su pri-
mo hermano Juan Mora Fernández, primer Jefe del
Estado de Costa Rica; Braulio Carrillo Colina, yerno
del señor Carranza, y quien sería Jefe de Estado unos
años más tarde; y dos operarios del taller de apellido
Abarca y que eran conocidos como Pantaleón chiqui-
to y Pantaleón grande. Esta imprenta se conserva hoy
y se exhibe en el Museo Nacional (Carranza, M.,s.f.).
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Araya, M. Manuel Carranza Vargas y la pintura histórica en Costa Rica.
La instalación de una imprenta en Costa Rica permitió
dar un gran salto en la divulgación de las ideas y de la
cultura en este naciente Estado, así como en la construc-
ción de una cultura cívica que impulsó y fortaleció la for-
mación ciudadana. Uno de los productos más inmedia-
tos al establecimiento de la imprenta fue la publicación,
en enero de 1833, de los primeros periódicos en el país,
El Noticioso Universal y el Correo de Costa Rica.
Referencias
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maestro Lorenzo Fortino. Crónica ficcional sobre
personas y hechos reales. Ensayo inédito.
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Rodríguez, B. (1998). Arte centroamericano. Editorial
Universitaria Centroamericana - EDUCA
Fotografía 1. Pintura “El taller de imprenta. Fuente: Carranza, M. (2020) en portada de Yulök Vol.5, Núm.2.